Decidir dónde comer puede ser una tarea desalentadora, especialmente cuando hay tantas buenas opciones apareciendo por todo Miami. Si quieres pasar la noche en Brickell, aquí tienes algunas opciones para todos los gustos culinarios.
PERRICONE'S
Lleno a rebosar cualquier noche, Perricone's es un lugar de visita obligada para cualquiera que haya vivido en Brickell. El amplio restaurante es hogareño y acogedor, con un extenso menú lleno de clásicos italianos (el pollo a la parmesana y la lasaña son deliciosos). Los jueves, es mejor llegar temprano para conseguir un asiento: no se puede perder la noche de pasta a 10 dólares. Perricone's es exactamente como te gustaría que fuera el restaurante italiano de tu barrio: cálido, animado y con música en directo de vez en cuando. Sólo se puede reservar apuntándose en la lista, así que prepárate.
THE RIVER SEAFOOD OYSTER BAR
Escondido junto al extenso Brickell City Center se encuentra el River Oyster Bar, que sirve algunos de los platos más deliciosos de la ciudad. Todo en este menú está cocinado a la perfección - Croquetas de Bacalao, Pulpo la Plancha, Filete de Pargo, y si realmente te apetece salirte de la dieta, los Gnocchi & Jumbo Lump Blue Crab. Esperemos que a todos los miembros de tu grupo les guste compartir, porque no hay ni un solo plato que no debas probar, ni siquiera las coles de Bruselas. El ambiente es cálido y agradable, ideal para una cita nocturna o simplemente para salir con los amigos. No dejes de probar los cócteles de la casa: el Green Mile y el Smoked son dos de los favoritos del público. Los fines de semana es muy recomendable reservar.
BABY JANE
A diferencia de sus homólogos metropolitanos, Miami no ha visto una gran afluencia de buenos restaurantes del sudeste asiático, pero en Brickell, si usted está buscando ramen, Baby Jane lo tiene cubierto. El menú es sencillo y ofrece una selección de platos básicos, como bao buns y ramen, y otros más interesantes, como Tuna Pizza y Poke Tacos. Los comensales pueden relajarse fuera o en el bar, ya que por la noche Baby Jane se convierte en un lounge, con una luz sensual y deliciosos cócteles (Shishito Mule, Chopsticks y Stones).
CANTINA LA VEINTE
Al entrar en Cantina La Veinte, uno se sumerge de inmediato en el glamour del Art Decó: paredes oscuras, sillas de respaldo alto en blanco y negro, una impresionante barra repleta de botellas en tonos joya. Sólo al cabo de un minuto o dos te das cuenta de que la decoración es mexicana. Los detalles de la iluminación parecen aztecas, la cerámica y los jarrones son obra de artesanos mexicanos y, por supuesto, la comida. La carta está repleta de clásicos mexicanos: tortas, pollo en mole, tacos, sopas y una impresionante selección de marisco. Tanto en el piso de arriba como en el de abajo, los comensales disfrutan de una hermosa vista de la bahía y toda su actividad. Se recomienda reservar.